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Martes, 17 de Septiembre de 2024. Menudo título ¿Verdad? La primera vez que lo ví, no supe leerlo. En matemáticas siempre me liaba con los símbolos. ¿Qué significa la G? En Física, si no me equivoco es la Gravedad. Y la V, si mi memoria no falla es Velocidad. Con lo cual, en un primer vistazo, la fórmula del título sería algo así como «La Gravedad (G) es mayor (>) conjunción lógica (^) a Velocidad (V)«. Si lo que acabo de poner tiene algún sentido en el mundo científico, cosa que no creo, para mi no es conocimiento útil.

¿Dónde he visto esa fórmula?

Esa imagen me salió por primera vez como idea para un tatuaje. No, no pienso hacer un diseño así y tampoco tengo claro por qué apareció en mi pantalla. Apareció, sin más. Desde luego que, para un aprendiz de tatuador, es ideal para practicar línea fina. Fuera de ahí, por lo visto en ciertos círculos se ha puesto de moda. Los tatuajes son un lenguaje simbólico personal. Puedes hacerte por ejemplo una flor y que para tí esa flor no sea solo una flor, sino que represente a una persona, una situación. Solo quien los lleva sabe lo que representa. Y, añadiría que no tiene por qué dar explicaciones a los que le rodean. Y no se trata de ser borde, es una historia personal que los tatuados eligen, o no, compartir con los curiosos. Sí, lo que acabo de escribir es una forma muy sutil de decir que me cansa que me pregunten por mis tatuajes. Sé que más de uno también lo está. Más cuando son visibles. ¡Ah! Otra cosa… respeta mi espacio personal, si no te conozco de nada, no tienes que cogerme el brazo para preguntar. No hay nada que me moleste más que las personas que se ponen a mi lado y para llamar mi atención me dan golpecitos en los brazos. Seguro que conoces a alguien con ese «tic». No lo aguanto. Si no te presto atención, será por algo ¿no crees? Y desde luego que invadas mi espacio personal para tocarme no va a conseguir que me interese lo que dices. Sí, suena borde, pero si te digo que mi signo zodiacal es virgo, y crees en lo que influye eso en la personalidad, lo mismo ya no te parece tan raro. No es que sea asocial, es que mi atención es muy selectiva.

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A estas alturas, si no lo has buscado, poco faltará. No mantengo más el suspense y te digo lo que significa: «God is greater than the highs and the lows«. Traducción muy libre: Dios es más grande que los altibajos. No voy a entrar en el supuesto choque de los tatuajes con las creencias y la religión que cada uno practique. Unos dirán «Dios», otros «dios», «el universo», «la vida», «la energía»… Elige tu opción. Supongo que la letra inicial se puede modificar, porque es un símbolo que requiere conocer el código para descifrarlo. En este caso, como el origen del tattoo es en inglés, dejaremos la letra G.

¿Qué significa?

Bueno, repito que los tatuajes son muy personales. Sin embargo, creo que es un recordatorio para ver la vida desde la distancia. Por eso la foto que ilustra el artículo es la vista de la tierra desde un avión. En concreto son las montañas rocosas para saciar la curiosidad de mis lectores. Cuando estamos metidos en las circunstancias de cada día, las dificultades pueden parecer el Everest. Lo vemos todo desde nuestra perspectiva. Y eso conlleva una interpretación muy mermada. Lo que está detrás de nuestras cabezas no solemos verlo salvo que tengamos un espejo delante. Nos agobiamos por errores del pasado, por esos pensamientos que no paran en nuestra mente y que influyen en nuestra realidad. Si vamos en «piloto automático» por la vida es posible que reaccionemos a lo que nos sucede. No que decidamos nuestra actuación, solo reaccionamos. Vamos apagando fuegos sin pensar. Nos comportamos como los perros reactivos, en vez de estar tranquilos, nos lanzamos a ladrar y a pegar tirones de la correa, en modo defensivo. Los problemas, las circunstancias como diría Ortega, nos caen encima como si estuviéramos en la zona donde rompen las olas, no has sacado la cabeza al pasar una y ya te llega otra. ¿Esa es la forma que quieres para tu vida? Vas de problema en problema. Un día estás en lo alto del Everest y al siguiente en lo más profundo de las fosas marianas. ¿Lo puedes llevar a tus emociones? Vives en carne viva, de la euforia a la tristeza más absoluta. Porque estás en plena vorágine. El lunes te hunde, el martes te sientes superman, para el miércoles volver a darte de bruces con el suelo. ¿Te suena? Todos tenemos periodos así. Hasta que nos atrevemos a pararnos, a cerrar los ojos y volver a nuestro interior. En este punto, voy a contarte un secreto: tus pensamientos, tus emociones, tus creencias… … … no son tú. Tú eres el observador que mira por la ventana del avión.

Esto también pasará

Si hay una verdad que funciona en esta vida es: «ESTO TAMBIÉN PASARÁ«. Somos humanos, mortales. Es bueno recordarlo. Relativiza mucho los obstáculos. Piensa en un viaje, en un trayecto que hagas de forma habitual. El atascazo de las mañanas en las grandes ciudades, la famosa «hora punta» por ejemplo. Si no vas en coche, vale la marabunta en los andenes del metro, los autobuses con gente hasta de pie, o los trenes cuyas puertas cuesta que se cierren. Sí, cuando llevas prisa te agobia y hasta puede cabrearte. No vas a ganar nada, pero te sale reaccionar así. Las posiciones en la tabla de cualquier competición deportiva son variables. Nos hemos acostumbrado a que los equipos habituales estén entre los 3 primeros pero no siempre tiene que ser así. Ni unos son tan buenos, ni otros son tan malos, hay muchas circunstancias a tener en cuenta. Haber escrito un bestseller no es requisito para que tu siguiente novela sea otro, el mundo literario está lleno de obras maestras y grandes truños. Pasas de la cima del Everest a las fosas marianas, para después subir al K2. Nuestro estado emocional se parece a una sierra. No hay corazón que lo aguante ni cuerpo que lo resista.

¿Y si no crees? ¿Lo llevamos un poco más allá?

A riesgo de ser tomada como un hereje, si te chirría ese concepto, cambia la G por una I (en español una Y): I am greater than the highs and the lows, Yo soy más grande que los altibajos. Sobre todo para tomar conciencia de que la capacidad está en ti, no solo en lo externo. ¿Cómo te suena? Es más que una frase bonita o motivacional. Te coloca en una perspectiva diferente. Ni eres el rey ni lo peor de este mundo. Cuando estás feliz, puedes vivirlo con serenidad, disfrutando el momento sin aferrarte a él. Lo mismo que cuando estás triste, en esa oscuridad de la caverna más profunda. No afecta a tu esencia, no la modifica. Lo mejor pasa y lo peor también. Puedes vivir cualquier cosa sin apegarte, dándole su justo valor. Sé que es complicado verlo cuando estás sufriendo o cuando estás disfrutando al máximo. Requiere entrenamiento, ir al centro de la distancia entre extremos del péndulo. Entiendo que por eso hay personas que se lo tatúan, para recordárselo, tenerlo presente, que sea como un ancla para la conciencia. No te quita la intensidad de las emociones, te da una perspectiva diferente. Y añado algo de cosecha personal: a veces me sorprende el pragmatismo de mi marido. Él ve un atasco y se mantiene tranquilo, de hecho lo habitual es que se ponga a cantar como si fuera un tambor en una procesión, no le afecta, no se altera. Lo mismo con las dificultades, si algo no sale como él esperaba, analiza como buen metódico y continúa. Es capaz de distanciarse del momento y analizar las opciones. Es algo habitual en él. A mi me cuesta más, aunque paso a paso, lo voy consiguiendo.

La posición del observador consciente

Ir por la vida con la mirada de los escritores. Lo sé, lo estoy llevando a mi terreno. Los escritores somos observadores conscientes. Hasta el detalle más pequeño puede ser el hilo del que tirar para descubrir una gran historia. Es una capacidad de detectives que nos apasiona. Nos entrenamos a base de leer y de escribir mucho, pero mucho mucho, para fijarnos en los detalles y no apegarnos a los personajes. Nos colocamos por encima de las circunstancias de las historias que contamos. Vemos el hilo argumental y aunque nos caiga muy bien el héroe, reconocemos que su antítesis es importante y necesario también. Al menos en las buenas historias. Y en teoría. Porque, a veces, te metes tanto en la historia que te termina llevando donde le place, no donde tú querías ir. Eso ya es material para otro post.

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¿A que ya no lo lees como «La Gravedad (G) es mayor (>) conjunción lógica (^) a Velocidad (V)«? Ya conoces el código para descifrarlo. ahora, si te interesa, hazlo tuyo, compruébalo en tu experiencia vital si quieres. Eres más grande que tus altibajos. No es orgullo, sino amor propio. Acéptalo. Mientras estés vivo, vas a tener altibajos, pero puedes observarlos desde la distancia, sin dejarte atrapar en ellos. Puedes con ellos, sean del tipo que sean, porque estás en movimiento. Esos altibajos te dicen más de tí, de cómo los afrontas, que de ellos. Son oportunidades para aprender, para dar respuesta.

Ya sabes, si te resuena y te atreves, te leo. Que pases una fantástica semana.

Comments

2 respuestas a «G>^V»

  1. Avatar de aixa
    aixa

    Me gustó, yo lo presentía, porque decir que lo sabía es más presuntuoso. Pero me gustó leerlo. En mis altos y en mis bajos me resulta de mayor claridad verlo escrito.

    1. Avatar de carrillocris

      Supongo que por eso se lo tatúan, al verlo escrito en su piel, se reafirma. Gracias por tu comentario, Aixa 🙂

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