Después de toda mi vida utilizando el explorer, reconozco que me ha costado cambiar el navegador; pero no he podido evitarlo. Me equivoqué al cambiar el explorer a la versión 9. Mi ordenador nunca ha tenido tantos problemas para navegar por la red. No podía tener acceso a las redes sociales, a abrir una web dentro de otra y otra serie de problemas como el poder publicar entradas en el blog. Al principio pensé que era la plataforma donde alojo el blog. Cambié a WordPress y tampoco me dejó. No podía ser; pero cambié al safari y ¡maravilla! pude publicar. Podía haberme quedado con el Safari, pero sin tener un Mac, creo que es preferible usar otro tripo de software. Me he decidido por el Firefox. Tengo que acostumbrarme a él, saberme sus truquillos. Por ahora ya sé dónde está el zoom, algo muy útil con mi ordenador que se cambia sin tener muy claro el motivo.